En 2009 Roger Federer no enfrentó a Rafael Nadal en la final del Roland Garros lo cual le permitió ganar su única e histórica victoria en el Gran Slam que no había podido ganar.

Fue el tenista sueco, Robin Soderling quien en esa ocasión le hizo el favor a Roger al quitarle del camino a Nadal, el gladiador del polvo de ladrillo, a quien sorprendió en octavos de final.

El maestro suizo ha mostrado su incapacidad de ganarle a Nadal en Paris, perdiendo las cuatro finales de 2006, 2007, 2008.y 2011.

Ahora en el Madrid Open, Roger Federer se corona y es Fernando Verdasco el que le quitó del camino a Nadal al derrotarlo en cuartos y Janko Tipsarevic quién elimina a Novak Djokovic.

La estrategia de dejar a otros tenistas hacer su trabajo sucio parece haber funcionado para el maestro suizo, quien con 30 años, ha demostrado que ha recobrado su nivel y que ha sabido aprovechar la ayuda de sus colegas tenistas que en varias ocasiones le han quitado de encima a sus dos máximos obstáculos.