El número dos del mundo se impuso al número uno para conquistar por primera vez Roma.

El británico Andy Murray se dio el mejor regalo de cumpleaños que se pudo dar al tomar  la revancha de la final perdida en Madrid ante el serbio Novak Djokovic al ganarle el título en el Masters de Roma 2016 por un doble 6-3 en una hora y 35 minutos de juego.

No sólo es el primer título de Murray en la tierra batida del Foro Itálico, sino una histórica primera corona para un tenista británico en este Masters 1000  en la Era Abierta.

Murray fue muy superior a Djokovic desde el inicio y capitalizó del cansancio del serbio al haber sobrevivido a dos partidos extenuantes, en los cuartos de final ante Rafael Nadal y la semis de tres horas ante Kei Nishikori. Andy salió a la pista decidido a hacer un tenis muy agresivo y a no esperar desde el fondo. Así tomó el control del partido, desquiciando al número uno del mundo, que terminó perdiendo los nervios con el juez de silla por no suspender el partido por lluvia.

Buenos resultados en tierra

El británico suma ahora tres títulos en tierra, Munich y Madrid en 2015 y, ahora, Roma, con un balance en la superficie en estos dos últimos años de 29 victorias en 32 partidos, apuntó, Con el fin específico de mejorar sobre arcilla, Murray contrató a Amélie Mauresmo en junio 2014. Aunque la relación se rompió hace unos días, la ex jugadora francesa rindió los resultados deseados, tanto así que ahora Andy aspira a ganar su tercer Grand Slam en París, declarando,  “Nunca hubiera pensado tener estos resultados en tierra, me permiten ir con confianza a Roland Garros”.

Respecto al partido destacó, “Hice pocos errores con el saque. También con el segundo servicio. En las últimas semanas he sacado bien y esto me da confianza. Además veo que genero muchas opciones al resto de mi juego, por lo que sacar bien me da confianza”.

La derrota no genera “dudas” en Djokovic

Por su parte, Djokovic reconoció que fue Murray el que mejor jugó. “Él fue quien tuvo un mejor nivel a lo largo de esta semana. Creo que está usando la cancha mejor ahora. Él tiene una mayor variedad en sus tiros desde el fondo”.

Pese a la derrota, el número uno del mundo explicó que su nivel de confianza es “alto”, debido a la cantidad de partidos no sólo en tierra, sino en el resto de superficies. “No me siento con dudas por esta derrota”, concluyó también ya con expectativas altas en Roland Garros 2016.