Bethanie Mattek-Sands se sacó la lotería en Melbourne ya que le tocó contra la diva rusa María Sharapova en primera ronda del Abierto Australiano, lo cual le aseguraba que su partido tendria cobertura televisiva de ESPN.

Y la tenista estadounidense lo aprovechó al máximo, llamando la atenciòn como acostumbra, con estrafalario vestuario que parece compró en una venta de garage o extrajo del armario de su abuelita, y que complementan sus floreados tatuajes naranja y morado en su brazo derecho, y su cabello teñido de colores neón.

Ubicada en el no. 43 del mundo, con 28 años de edad, un juego sòlido pero no espectacular y un físico “normal”, Bethanie utiliza su estilo de moda extrema como herramienta para atraer cobertura de los medios y con esto, patrocinadores. Entre sus sponsors están Babolat, una aseguradora, una clínica de rehabilitación y también Google mordió el anzuelo al seleccionarla a mediados del 2013 para ser una de las mil personas que probarían los Google Glasses.

Como era de esperarse en el Abierto Australiano, Mattek-Sands fue derrotada por Sharapova 6-3, 6-4, pero la cantidad de fotos que se publicaron en el mundo de ella y su moda radical son un indicio de que obtuvo la exposición que quería de la cual podrá capitalizar aún más.